Antes de partir para China estuve dándole vueltas a la mejor forma de comunicarnos con nuestras familias. Por un lado teníamos internet y por otro nuestros móviles que son libres de origen. Con internet teníamos un problema de no saber si Skype o similares está soportado allí (por el tema de la censura en las comunicaciones). Parecía que sí pero al final la batalla la ganó el hecho de leer en alguna web de gente que había comprado tarjetas SIM de la compañía ChinaMobile (compañía telefónica mayoritaria en China) que son perfectas para hablar dentro del país así como recibir llamadas desde fuera (no se puede llamar con ellas desde China al extranjero, al menos con las que adquirimos).
Lo primero que hicimos después de salir del hotel fue localizar un banco donde cambiar nuestros Euros por Yuanes. Aproximadamente un Euro son 10 Yuanes. Los Yuanes son la unidad monetaria más alta ya que luego hay una moneda menor que el Yuan, que casi no se usa (Jiao). En el banco nos chocó muchísimo que, en la ventanilla donde nos atendieron, una chica tenía debajo una tarjeta de presentación donde indicaba que era agradable, sería, servicial... Era muy curioso. Tanto, que miramos a los otros empleados tras la vitrina y parecía poner más o menos lo mismo en cada uno. Durante nuestro viaje tuvimos que volver varias veces allí a cambiar dinero. Era dificil cambiarlo ya que el dinero tenía que estar en perfecto estado, es decir, llevamos en una ocasión un billete de 20 euros que tenía un pequeño roto en medio, pero éste era de menos de 1 milimetro. Nos lo rechazaron. Al menos si necesitábamos dinero podíamos sacar de un cajero automático usando nuestra VISA de crédito, pagando solo 50 centimos de canon lo cual no está nada mal teniendo en cuenta dónde estábamos.
Con Yuanes en nuestro poder, todavía era de día aunque empezaba a anochecer. Caminando por el barrio no sabíamos muy bien adonde dirigirnos para poder comprar las dichosas tarjetas SIM. Deberíamos ir a una tienda de telefonía móvil? Sí, podría ser, de hecho después vimos en tiendas de telefonía que los chinos tienen forma de elegir el número que conforma su tarjeta. Para ellos el 8 da buena suerte por ello si el número contenía algún 8 se vendía más caro de lo normal. Por supuesto, un número con muchos ochos tiene que ser carísimo. Otros número como el 2 (si no recuerdo mal) no son tan afortunados y cuestan más baratos. Y, preguntando, tuvimos la respuesta en un Kiosco de prensa que estaba cerca del hotel que las tenía! ¿Cómo hacerte entender con un chino que no habla inglés y mucho menos castellano? pues por gestos, como siempre! Eso fue toda una aventura. Le preguntamos, con el móvil abierto y enseñándole la SIM que teníamos de España por gestos si tenía una de éstas. El chino, nos miró perplejo y acto seguido sacó una hoja con un montón de números escritos, algunos tachados. Parecían números de teléfono. Claro, estos no empiezan por 6 como en España así que nos costó un poco saber qué era eso. Cuando le dijimos uno cualquiera nos sacó de una bolsa grande, un sobre más pequeño con la imagen de un chino y con muchos caracteres ininteligibles en el papel, nos lo abrió y enseñó la SIM. Claro, ya casi lo teníamos y entonces empezó a... pedir por ella. Pedir precio por ella. O al menos eso nos parecía jejeje. Sin darnos cuenta, era nuestro primer regateo! Los chinos regatean por todo cuando te venden algo, no tienen un precio fijo. Y así, para nuestra sorpresa, le dijimos, con cara rara y aspavientos, que era muy caro e hicimos gesto de irnos y entonces él bajó el precio! Estábamos alucinados, al final cada SIM nos salió por unos 7 euros al cambio.
Vale, ya teníamos las SIM pero resulta que no era suficiente. A todo esto, una adolescente china, se acercó a comprar algo en el Kiosco y se quedó, divertida, a ver qué hacíamos. En inglés (los adolescentes hablan inglés, los adultos, por lo general no) nos preguntó que de donde éramos. España no es conocida en Beijing o al menos eso pudimos ver ya que lo de "Spain" no lo entienden. Ellos entendían algo como "Sipanya" que es como ellos llaman a España. Los ojos de la chica estaban como platos y entonces hizo de intérprete con el kiosquero. Ella nos indicó que, una vez puestos las SIM en los móviles hacía falta darlos de alta, llamando a un número gratuito. El problema estaba en que la locución estaba en chino y no había forma de cambiarlo, por lo que el kiosquero nos las activó. Eso era un show. Los viandantes nos miraban de reojo, la chica estaba divertida traduciéndonos. Nos sorprendió lo serviciales que son. El kiosquero, con una sonrisa de oreja a oreja, también estaba disfrutando. A saber qué estarían pensando pero nosotros estábamos riéndonos como nunca. Al final, tras dar las gracias a ambos, nos marchamos de allí, haciendo pruebas entre nosotros.
El resultado fue excelente, podíamos llamarnos a nosotros mismos por lo que si nos separábamos estaríamos comunicados. Ya es bastante dificil estar en un sitio así y perderte! y por otro lado nuestros familiares podrían llamarnos.
Esto último lo resolvimos comprando una tarjeta, en España, llamada Jazzpanda. Es la típica tarjeta con un rasca con el que obtienes un pin y tras marcar una serie de números y almohadillas en un teléfono fijo local se puede llamar al móvil chino con un coste ínfimo. Tanto que la tarjeta tenía 5 euros de saldo y nunca se llegó a gastar. Este saldo caduca una vez activada en un tiempo X de no uso.
Pero todavía nos tocaba cenar... en el próximo capítulo os contaré como fue. ¿Encontraríamos un rollito de primavera para cenar?
Lo primero que hicimos después de salir del hotel fue localizar un banco donde cambiar nuestros Euros por Yuanes. Aproximadamente un Euro son 10 Yuanes. Los Yuanes son la unidad monetaria más alta ya que luego hay una moneda menor que el Yuan, que casi no se usa (Jiao). En el banco nos chocó muchísimo que, en la ventanilla donde nos atendieron, una chica tenía debajo una tarjeta de presentación donde indicaba que era agradable, sería, servicial... Era muy curioso. Tanto, que miramos a los otros empleados tras la vitrina y parecía poner más o menos lo mismo en cada uno. Durante nuestro viaje tuvimos que volver varias veces allí a cambiar dinero. Era dificil cambiarlo ya que el dinero tenía que estar en perfecto estado, es decir, llevamos en una ocasión un billete de 20 euros que tenía un pequeño roto en medio, pero éste era de menos de 1 milimetro. Nos lo rechazaron. Al menos si necesitábamos dinero podíamos sacar de un cajero automático usando nuestra VISA de crédito, pagando solo 50 centimos de canon lo cual no está nada mal teniendo en cuenta dónde estábamos.
Con Yuanes en nuestro poder, todavía era de día aunque empezaba a anochecer. Caminando por el barrio no sabíamos muy bien adonde dirigirnos para poder comprar las dichosas tarjetas SIM. Deberíamos ir a una tienda de telefonía móvil? Sí, podría ser, de hecho después vimos en tiendas de telefonía que los chinos tienen forma de elegir el número que conforma su tarjeta. Para ellos el 8 da buena suerte por ello si el número contenía algún 8 se vendía más caro de lo normal. Por supuesto, un número con muchos ochos tiene que ser carísimo. Otros número como el 2 (si no recuerdo mal) no son tan afortunados y cuestan más baratos. Y, preguntando, tuvimos la respuesta en un Kiosco de prensa que estaba cerca del hotel que las tenía! ¿Cómo hacerte entender con un chino que no habla inglés y mucho menos castellano? pues por gestos, como siempre! Eso fue toda una aventura. Le preguntamos, con el móvil abierto y enseñándole la SIM que teníamos de España por gestos si tenía una de éstas. El chino, nos miró perplejo y acto seguido sacó una hoja con un montón de números escritos, algunos tachados. Parecían números de teléfono. Claro, estos no empiezan por 6 como en España así que nos costó un poco saber qué era eso. Cuando le dijimos uno cualquiera nos sacó de una bolsa grande, un sobre más pequeño con la imagen de un chino y con muchos caracteres ininteligibles en el papel, nos lo abrió y enseñó la SIM. Claro, ya casi lo teníamos y entonces empezó a... pedir por ella. Pedir precio por ella. O al menos eso nos parecía jejeje. Sin darnos cuenta, era nuestro primer regateo! Los chinos regatean por todo cuando te venden algo, no tienen un precio fijo. Y así, para nuestra sorpresa, le dijimos, con cara rara y aspavientos, que era muy caro e hicimos gesto de irnos y entonces él bajó el precio! Estábamos alucinados, al final cada SIM nos salió por unos 7 euros al cambio.
Vale, ya teníamos las SIM pero resulta que no era suficiente. A todo esto, una adolescente china, se acercó a comprar algo en el Kiosco y se quedó, divertida, a ver qué hacíamos. En inglés (los adolescentes hablan inglés, los adultos, por lo general no) nos preguntó que de donde éramos. España no es conocida en Beijing o al menos eso pudimos ver ya que lo de "Spain" no lo entienden. Ellos entendían algo como "Sipanya" que es como ellos llaman a España. Los ojos de la chica estaban como platos y entonces hizo de intérprete con el kiosquero. Ella nos indicó que, una vez puestos las SIM en los móviles hacía falta darlos de alta, llamando a un número gratuito. El problema estaba en que la locución estaba en chino y no había forma de cambiarlo, por lo que el kiosquero nos las activó. Eso era un show. Los viandantes nos miraban de reojo, la chica estaba divertida traduciéndonos. Nos sorprendió lo serviciales que son. El kiosquero, con una sonrisa de oreja a oreja, también estaba disfrutando. A saber qué estarían pensando pero nosotros estábamos riéndonos como nunca. Al final, tras dar las gracias a ambos, nos marchamos de allí, haciendo pruebas entre nosotros.
El resultado fue excelente, podíamos llamarnos a nosotros mismos por lo que si nos separábamos estaríamos comunicados. Ya es bastante dificil estar en un sitio así y perderte! y por otro lado nuestros familiares podrían llamarnos.
Esto último lo resolvimos comprando una tarjeta, en España, llamada Jazzpanda. Es la típica tarjeta con un rasca con el que obtienes un pin y tras marcar una serie de números y almohadillas en un teléfono fijo local se puede llamar al móvil chino con un coste ínfimo. Tanto que la tarjeta tenía 5 euros de saldo y nunca se llegó a gastar. Este saldo caduca una vez activada en un tiempo X de no uso.
Pero todavía nos tocaba cenar... en el próximo capítulo os contaré como fue. ¿Encontraríamos un rollito de primavera para cenar?
Oye Gustavo y ¿porque no llevasteis los Yuanes desde aquí? ¿porque esperasteis a cambiarlos allí? en el viaje de estudios cambiamos previamente el dinero para poder gastar nada más llegar.
ResponderEliminarEn China no lo he probado pero en Perú si pude sacar dinero en el cajero con la tarjeta de débito porque con la de crédito además de la comisión que te cobran al realizar la operación luego también pagas intereses aunque eso supongo que depende de como tengas definidas las cuotas mensuales.
¿Los Yuanes y el Yuan son cosas distintas? vaya yo que pensaba que 10 Yuanes eran 10 monedas de 1 Yuan
Son muy peculiares los chinos, el detalle de la tarjeta de identificación de los empleados del banco mola. Aquí creo que no ponen eso porque siempre tendrían que poner cosas malas (salvo en contadas ocasiones)
Anda que vaya historias para comprar la SIM me habría gustado ver tu cara cuando el chino empezó con el regateo del precio y más aún con el tema de la activación. ¡¡¡Todo un show!!!
Es curioso eso de tener precios más caros para los números que dan buena suerte ¿sucede lo mismo con todo? por ejemplo ¿con las matrículas de los coches? Imagino que si tu número tiene muchos 2 no te llamara nadie jeje.
Por cierto, el tema de la tarjeta JazzPanda imagino que querrás decir que esa tarjeta es la que usaban vuestros familiares desde España para llamaros a China ¿no? Es que como dices que la comprasteis vosotros parece que la comprasteis en China pero ya imagino que Jazztel no esta en China. Además supongo que la compraríais vosotros antes de salir para China y se la dejaríais a vuestros familiares con el correspondiente "manual de uso" ;D
Me ha gustado mucho el artículo Gustavo. Muy útil para todos aquellos que tengan pensado viajar a China, por lo menos así sabrán una forma fácil (y económica) de comunicarse estando allí.
Por cierto ¿que saldo tenían las tarjetas que comprasteis? ¿cuanto costaba llamaros entre vosotros?
Jejeje, veo que hay cosas que quizás no he explicado lo suficiente, paso a contestarlas:
ResponderEliminar10 Yuanes son 10 billetes (también las hay en monedas) de 1 Yuan. El problema está que hay monedas menores (Jiao) que conforman 1 Yuan. Son como céntimos pero tienen un valor tan irrisorio que es como los céntimos de euro. Si no recuerdo mal 100 Jiaos son un Yuan. Por eso, casi todas las cosas que se vendían costaba 1 Yuan en adelante. Supongo que sería como el Euro en España y el café a 1 Euro... :(
Con las matrículas de coche pasa más o menos lo mismo aunque no me queda del todo claro si se pueden elegir. Los chinos parece que son bastante supersticiosos en esos temas.
Efectivamente la tarjeta Jazzpanda la venden en España y después, vía mail les facilitamos a nuestros familiares los números de las SIM para que nos pudieran llamar desde España.
Las tarjetas no sé decirte qué saldo inicial tenían, pero sí decirte que no se nos llegó a gastar nunca si bien le hicimos uso bastante intensivo, por lo que la opción fue muy buena. El problema habría sido recargarlas (no me queda muy claro aún como lo habríamos hecho jejeje).
Me alegro que te guste el artículo, próximamente más!
Qué curioso, te vas tranquilamente de viaje y no te paras a pensar en la aventura que supone tan sólo el estar comunicado con los demás.
ResponderEliminarA ver, a ver cómo solucionásteis lo de la cena, esencial también en un viaje...
Un beso, Gustavo.
Qué grandes sois!! Seguro que os lo estáis pasando genial!!!.
ResponderEliminarHola agux!!!, ya quisiera yo haber ido a China con Gustavo... jeje
ResponderEliminarHola Agux! el viaje lo realicé el año pasado, por estas fechas, con mi pareja y no, no es Fossie XD aunque a veces lo parezcamos jajaja. Me alegro que os gusten estas historias, me esforzaré por seguir contando lo que pasó, hay muchas anécdotas y cosas curiosas que aquí no estamos acostumbrados a ver.
ResponderEliminarSaludos!
La censura en las comunicaciones y en Internet os la podríais haber saltado con una VPN personal:
ResponderEliminarVPN´s personales
Puse un enlace al blog de Enrique Dans que también hizo un viaje a China para unas conferencias y se salto con ellas cualquier tipo de restricción.
Un Saludo.
Muchas gracias por la info Andromeda! la verdad es que lo desconocía. Siempre se aprende todos los días, lo tendré en cuenta para un futuro que viaje de nuevo a China (creo que no en breve :( )
ResponderEliminarGustavo ¿así que tienes otra pareja que no soy yo? me voy a enfadar!!!! jajajajaja
ResponderEliminarYo tampoco he usado nunca una VPN aunque he oído hablar de ellas pero siempre he pensado que serían algo lentas (como al usar un proxy) sobre todo las gratuitas. De todos modos tampoco pensé en ello cuando Gustavo planeaba su viaje.
Yo llevo mucho tiempo queriendo montarme una. En cuanto la tenga, intentaré hacer un pequeño manual.
ResponderEliminarEsta tarjeta Jazzpanda ya no esta disponible para llamadas a china, sólo se puede usar Jazzcard disponible en http://www.simcardmovil.com
ResponderEliminar